“La gente piensa que un pandero es un simple aro de madera, con un trozo de piel y unas piezas de metal que sirve para hacer, sobre todo, ruido. Pero se equivoca. El pandero de Brasil es el alma de su música, el alma de su samba y la pulsación mágica que lo envuelve todo, de lo que todo proviene y a la que toda la música que se haga volverá alguna vez.

Tamima conoce absolutamente todos los secretos y ritmos de este instrumento simple y único. En sus manos es maleable, es un órgano lleno de sangre africana que se multiplica y se convierte en un ejército capaz de conquistar todo. Pero afortunadamente no sólo sale esa percusión de las manos de Tamima. La música que está amasando junto a Elena Diz en su dúo eLeTá también nos va a sorprender, llena de luz y alumbrando nuevos caminos de fusión entre esta España del sur y el Brasil del nordeste. Su participación en nuestro curso se va a recordar, con mucha saudade, por muchísimo tiempo”

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Miguel Á. Fernández. Codirector del Aula de Músicas del Mundo, III Curso sobre la Música de Brasil de la Universidad de Oviedo.